Mi esposa cena con un hombre mientras yo trabajo

Hola, para mí escribir es una tortura pero quería compartir la realización de mi mayor fantasía.

Con 39 y 41 años, juntos desde hace 24 años y con dos hijos, llevamos varios años en el libertinaje. Mi esposa se cansó de este ambiente y desde hace más de un año ya no quería conocer gente ni salir a lugares de perversos.

Aunque en el pasado todos nuestros encuentros salieron muy bien. Hace unos meses le sugerí que dejáramos a los niños con su abuela, que yo me buscara una ocupación y que ella contactara de nuevo a un amante ya conocido. Una vez organizado todo, canceló con este señor pretextando fatiga crónica.

En ese momento entendí que debía renunciar al libertinaje y, sobre todo, lo que más me entristeció fue renunciar al cornudo, porque siento más placer viéndola ofrecida que intercambiando con parejas.

Para mí verla ofrecida es un ramo de placeres, como un ramo de flores con matices de colores diferentes. Sensaciones distintas me revolucionan cada vez que la veía poseída por otro hombre.

Pasa el tiempo, la decepción se instala, la decisión de cerrar nuestro perfil en wyylde etc... se hace presente. Mis turnos de noche en el trabajo nos impiden tener relaciones de pareja debido a los horarios desfasados. Una noche me envía una foto picante mientras trabajo diciéndome: "Me toca ocuparme yo sola, qué lástima".

No me atrevo a proponerle nada por miedo a que se enfade otra vez llamándome todos los sinónimos de perverso y obseso. Le digo que a mi vuelta la despertaré para darle un abrazo y que mientras tanto no tiene más que masturbarse.

Ella confirma mis palabras, pero señala que mañana no tiene a los niños, están al cuidado de los abuelos, y además yo no estaré, que le apetecería salir a bailar. "Si no te importa (dice riendo) puedo pedirle a Chris que me acompañe al restaurante y después ya veremos".

Chris es el señor al que canceló hace unas semanas, pero Chris es sobre todo una persona de confianza, libertino de alma, y sobre todo alguien que ya ha hecho llegar al orgasmo a mi dulzona varias veces.

Le doy mi aprobación y le aclaro que el señor no está a su disposición y que sería impensable darle plantón después. Y que si se hace disponible, como viene de bastante lejos, no es para recibir un plantón, así que como mínimo deberá cenar con él.